10 de enero de 2013

Mabuhay | Welcome | Wilkommen | Bienvenue to the Philippines

Despues de 16 horas de avion y una escala de 2 horas en Doha (Qatar), llegue a Manila.

Rizal Park
Esta vez sali del aeropuerto muy rapido, ya que conocia todo el proceso de inmigracion y una vez ensenado el pasaporte y visado en regla unas tres veces me dirigi a la salida con la intencion de coger un taxi.
Esta vez no me iban a engañar, sabia perfectamente que los taxis que se ponen justo delante de la puerta, te cobran el doble, asi que fui hacia la zona donde creia que iba a encontrar taxis decentes, y los encontre.
Esos taxis que despues de una hora de ruta, y que te cobre solamente cinco euros, parece que el que enganes seas tu.

Quiapo desde el Rio Pasig

Ya en el hostal, me acomodo en el dormitorio compartido con ocho chavales como yo. Me pego una ducha de agua fria (como las echaba de menos) y a cenar por el barrio de Malate.
Alli conozco a Paul, un australiano que era su ultimo dia en la ciudad, y Fred, un noruego que en dos dias se iba hacia Japon.
Una muy buena conversacion acompañada de unas San Miguel.
Parece que la noche se anima cuando un grupo de mas australianos, un aleman y un polaco se sientan con nosotros. Pero era consciente que necesitaba descansar, asi que tuve que abandonar e irme a dormir.



Palacio del Gobernador
A punto de empezar a grabarse un programa de TV



Tomando un descanso en Intramuros
Ya por la mañana, con las pilas recargadas, me voy hacia Intramuros, lugar donde estuve la primera vez que me aloje en Manila.
He vuelto a visitar todas las ruinas, zona amurallada y el Fuerte Santiago, esta vez sin prisas de ningun tipo.
Un paseo de cuatro horas intenso, con mucho calor pero disfrutando al maximo.

Manila quizas no sea la ciudad mas bonita del mundo, no sera la mas segura, ni el calor y la humedad acompañen, probablemente sea una de las ciudades mas contaminadas del planeta, por no hablar del trafico agobiante y peligroso que te rodea a cada paso, esos olores, vendedores ambulantes que te persiguen, los ninos de la calle... pero tiene algo que engancha y hace que la eches de menos cuando te vas.

Una cosa curiosa que me ha pasado hoy. Me han echado de una iglesia! Por una vez que entro en una y me echan fuera!!
El motivo es que cuando se esta celebrando una misa, los extranjeros no podemos entrar.
Aunque ahora que lo pienso, en Puerto Princesa (Palawan) pude entrar en la catedral mientras se estaba celebrando.
En fin...Esto es Filipinas...

Ahora toca reponer fuerzas para la noche. Quizas voy a cenar al restaurante de un amigo catalan que hice cuando estuve en verano.

Keep in touch!!

1 comentario:

  1. a ti te he echaron de la misa por pecador no por extranjero jajajja
    vengaaaa una abraçada Álvaro!

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